Los lugares de trabajo deben mantener la limpieza y el orden, así como también establecer ciertas normas para conservar cada área en condiciones óptimas. Esto, con la finalidad de proteger al personal y disminuir los riesgos laborales en almacenes.
Los accidentes en estos espacios ocurren por distintas razones. La mayoría se relacionan con el desorden, el mal manejo de objetos y sustancias peligrosas; y falta de conocimiento en cuanto a la manera de llevar a cabo ciertas actividades, cuyos procesos requieren del uso de equipamientos especiales.
En este sentido, es importante conocer cuáles son los peligros más comunes a los que se exponen las personas que trabajan en almacenes y algunas recomendaciones para disminuir estos riesgos, pues solo generan lesiones que ponen en riesgo la salud sino además causan daños materiales en las instalaciones.
CUANDO LAS COSAS NO ESTÁN EN SU LUGAR
La suciedad y el desorden generan escenarios que implican riesgos laborales en almacenes. Por ello, mantener la limpieza y el orden es un factor clave que influye en la seguridad de un espacio de trabajo.
Por ejemplo; al derramarse líquidos aceitosos o viscosos en los pisos, los trabajadores se exponen a sufrir caídas que, según su gravedad, tendrían consecuencias severas.
Así mismo, podría haber pérdidas materiales en tanto los objetos se deterioren al entrar en contacto directo con estas sustancias. Para evitar estos accidentes; se sugiere ubicar cada elemento en un lugar apropiado donde no obstaculicen el paso de las personas ni el espacio destinado para otros materiales.
Es también recomendable que, al derramarse algún líquido en cualquiera de las zonas del almacén, se utilice una señalización para impedir el tránsito por el área y así, poder removerlo rápidamente.
Por su parte, los sistemas de paletización y los estantes también implican riesgos laborales en almacenes, pues, en ocasiones, estos no son ubicados correctamente.
Lo ideal es situar cada uno de estos elementos con suficientes espacios entre sí. Sobre todo si es un área en la que se utilizan vehículos de carga, ya que se debe facilitar el desplazamiento de los trabajadores.
MANIPULACIÓN DE HERRAMIENTAS Y MATERIALES
Con frecuencia, hay utensilios de trabajo que causan daños si se usan de manera indebida. En ese sentido, las tijeras, cuchillas y los dispensadores de cinta deben ser manipulados con cuidado. Para evitar accidentes por causa de estos objetos, se recomienda:
- Situarlos en un lugar seguro
- Evitar el uso de herramientas cortantes que estén oxidadas y, en su lugar, sustituirlas por otras que estén en óptimas condiciones
De igual forma, los riesgos laborales en almacenes causados por este tipo de objetos han de evitarse si se guardan inmediatamente después de su uso.
GOLPES, TROPIEZOS Y CAÍDAS
Otras de las situaciones que suelen ser muy comunes son las caídas. Estas pueden producirse de distintas maneras y su gravedad también dependerá de ciertos factores como la altura.
Por lo general, las caídas ocurren por diversas razones, entre ellas:
- Al tropezar con algún objeto en el almacén
- Por una escalera en mal estado
- Cuando se descarga material de los camiones
- Al resbalarse por causa de líquidos derramados en el suelo
- Por aberturas y desperfectos en el piso
Adicionalmente, manejar maquinaria pesada implica otros riesgos laborales en almacenes en los que el operador hiere accidentalmente a otros empleados. En el caso de quienes hacen uso de vehículos montacargas, tanto los operadores como los supervisores deben encargarse de que los materiales estén asegurados al vehículo para que no se desprendan.
Así mismo, como medida de seguridad nadie debe situarse bajo cargas suspendidas, lo cual ayudará a evitar golpes o arrollamientos cuando el vehículo se mueva.
Los trabajadores también pueden golpearse con estantes y escaleras, por lo que es fundamental que, después de utilizarlos, sean ubicados en lugares donde no interfieran con las labores del personal.
INCENDIOS EN EL ALMACÉN
Entre los riesgos laborales en almacenes también destacan los incendios. Estos se propician, generalmente, por fallas eléctricas o materiales inflamables que dan inicio a las llamas que ponen en peligro al personal.
Hay múltiples formas de evitarlos. En principio, es indispensable llevar a cabo una inspección periódica para revisar el estado del cableado de la electricidad. Esto ayudará a determinar si existe alguna falla o avería que pueda ocasionar un corto circuito.
Igualmente, los materiales inflamables deben estar debidamente identificados y almacenados en lugares ventilados donde no tengan contacto con ninguna forma de calor. Además, el almacén debe tener extintores, los cuales son útiles en caso de emergencia.
CÓMO REDUCIR LOS RIESGOS LABORALES EN ALMACENES
Estos riesgos disminuyen notablemente cuando se cumplen con las siguientes normas de seguridad:
- Delimitar debidamente las zonas de carga y descarga de materiales
- Asegurarse de que el piso del almacén no tenga irregularidades
Revisar las condiciones de las escaleras, estanterías, vehículos de carga y herramientas de trabajo - Inspeccionar eventualmente el estado del cableado que surte electricidad en el almacén
- Ubicar las sustancias tóxicas e inflamables en un lugar seguro que no interfiera con las actividades de los trabajadores
- Mantener el almacén limpio y ordenado
- No exceder la capacidad de peso en las estanterías
- Señalizar debidamente las salidas de emergencia
Por su parte, el personal que labora en cada área también ha de seguir ciertas normativas, tales como:
- Hacer uso adecuado de los equipos de seguridad cada vez que sea necesario
- Evitar treparse en las estanterías
- Usar los vehículos de carga y las herramientas con responsabilidad
Sin duda, aunque hay múltiples riesgos laborales en almacenes, es necesario cuidar las instalaciones y realizar cada tarea con precaución y responsabilidad. En este sentido, seguir las normas y medidas de seguridad permitirá trabajar con eficacia, a la vez que se reducen las posibilidades de sufrir accidentes.